Se cree que los compuestos de azufre contenidos en el ajo tiene beneficios antibióticos y anti virales, ya que las verrugas son causadas por una infección viral en la capa superior de la piel, que si bien son inofensivas y no son muy contagiosas, son verdaderamente anti estéticas.
El tratamiento convencional incluye cremas que contienen ácido salicílico (quemar la verruga para destruir el tejido), pero estos pueden tardar meses en ser efectivos, así como también la criocirugía (congelamiento) es más rápida, pero puede ser dolorosa, especialmente para los niños que son los más propensos a sufrir de verrugas.
En el estudio se llevó a cabo sobre 23 personas que utilizaron el extracto oleoso de ajo dos veces al día y después de una a dos semanas, todos estaban libres de verrugas, aunque los efectos secundarios incluyeron enrojecimiento y ardor.