En China, el extracto de raíz de kudzu se ha usado por mucho tiempo para reducir, aunque no suspender, el consumo y la dependencia al alcohol, aunque su mecanismo de acción ha sido un misterio.
Para examinar este antiguo remedio, los científicos de la facultad de medicina de las Universidades de Harvard y de Brown asignaron a doce voluntarios de ambos sexos a tomar kudzu o un placebo durante nueve días y luego a consumir diversas cantidades de alcohol para que los investigadores pudieran evaluar los efectos relacionados con el alcohol.
Los investigadores hallaron que el tratamiento previo con kudzu tuvo poco o ningún efecto sobre las capacidades conductuales, físicas o cognitivas, pero sí causo un aumento en el ritmo cardiaco, la temperatura de la piel y los niveles de alcoholemia.
A partir de estos hallazgos, los científicos sugieren que un aumento en los niveles de alcoholemia podría implicar más efectos de la primera bebida consumida y retrasar el deseo de consumir más.
El estudio aparece en línea y en la edición impresa de abril de la revista Alcoholism: Clinical & Experimental Research.
"El hecho de que los participantes experimentaran un aumento rápido de los niveles de alcoholemia cuando recibían tratamiento previo con kudzu no tiene explicación aparente, por lo que exige investigación adicional", aseguró en un comunicado de prensa de la revista David M. Penetar, autor principal y profesor asistente de psicología del departamento de psiquiatría del Hospital McLean de Belmont, Massachusetts.
Planean usar escáneres con IMR para determinar si el kudzu altera el flujo sanguíneo en el cerebro.