Está indicada para tratar y prevenir los problemas pulmonares. También reduce las infecciones y favorece la curación de quemaduras y heridas.
El espliego tiene propiedades antisépticas y cicatrizantes. Sus propiedades antivíricas, antimicrobianas bacteriostáticas han sido demostradas in vitro.
Una cucharadita o dos de miel puede reducir la producción de moco y la tos. También elimina los gérmenes.
La Agencia Europea del Medicamento (EMA) aprueba el uso tradicional de la flor y el aceite esencial de espliego para aliviar síntomas leves de estrés mental y agotamiento y para ayudar a dormir.
Pero recuerda, en los bebés puede causar botulismo, una forma rara de intoxicación alimentaria, por lo que nunca debe darse a niños menores de un año.
No hay que confundir la lavanda común o espliego (Lavandula angustifolia), el espliego híbrido o lavandín (Lavandula angustifolia x latifolia), la alhucema o espigón (Lavandula latifolia) y el cantueso (Lavandula stoechas) ya que son de la misma familia pero diferentes.
Por esta razón las mieles de espliego o lavanda son diferentes y pueden tener distinto color, sabor, aroma y propiedades.
La producción de miel de espliego está presente en la mayor parte de la geografía española, principalmente en Aragón, Cataluña, Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha y Castilla y León.
Un estudio de 2009 encontró que consumir miel con regularidad podría tener efectos beneficiosos sobre el peso corporal y los lípidos en sangre en personas con diabetes. Sin embargo, también se observó un aumento significativo en la hemoglobina A1C.
La miel de alta calidad contiene antioxidantes y nutrientes, por lo que es una mejor opción que el azúcar refinado.
Sin embargo, su consumo aporta niveles altos de calorías y carbohidratos y no se recomienda su consumo en dietas de adelgazamiento.
Cuando se aplica sobre la piel, la miel puede formar parte de un plan de tratamiento eficaz para quemaduras, heridas y muchas otras afecciones de la piel. Es particularmente eficaz para las úlceras del pie diabético.
Nutricionalmente 1 cucharada de miel (21 gramos) contiene 64 calorías y 17 gramos de azúcar, que incluyen fructosa, glucosa, maltosa y sacarosa.
100 gramos de miel aportan:
Nutriente | Cantidad | Unidades |
Energía | 304 | kilocalorías |
Proteinas | 0,3 | gramos |
Lípidos totales (grasas) | 0 | gramos |
Carbohidratos | 82,4 | gramos |
Fibra dietética total | 0,2 | gramos |
Sacarosa | 0,89 | gramos |
Glucosa (dextrosa) | 35,75 | gramos |
Fructosa | 40,94 | gramos |
Maltosa | 1,44 | gramos |
Calcio | 6 | miligramos |
Hierro | 0,42 | miligramos |
Magnesio | 2 | miligramos |
Fósforo | 4 | miligramos |
Potasio | 52 | miligramos |
Colesterol | 0 mg | Dosis diaria necesaria |
Fuente: FoodData Central
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