Es un potente antioxidante, previene y trata la diabetes, las cataratas, glaucoma, Infecciones víricas. Y protege las arterias, venas y capilares.
El brócoli es una fuente alimenticia del ácido alfa lipóico. También está presente en las espinacas y acelgas.
Diferentes estudios sugieren que este nutriente puede influir positivamente en el tratamiento de enfermedades hepáticas.
También se ha demostrado su efecto protector frente a la hepatotoxicidad inducida por metales pesados o sustancias tóxicas.
El ácido alfa-lipoico favorece la absorción por parte de las células de la glucosa sanguínea, una tarea propia de la insulina. Cuando la insulina disminuye, el ácido alfa-lipoico podría evitar las peligrosas subidas de glucosa en sangre, favoreciendo su absorción en las células.
Un antioxidante liposoluble como el ácido R-Lipoico, en una dosis de 600 mlg al día, con la ingesta de alimentos que contengan materia grasa puede evitar el daño de los radicales libres post-ingesta excesiva de alcohol en el sistema nervioso central y, con ello, la temida resaca.
Comercialización en herbolarios de ácido alfa lipóico
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El Ácido Lipóico es un antioxidante por su capacidad de captación de radicales libres.
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